En los primeros años de vida se produce el mayor trabajo de constitución subjetiva, si estos procesos no se realizan adecuadamente durante esta etapa, pueden tener lugar algunos trastornos difíciles de solucionar transcurrido ese período.

En el último tiempo los niños con Trastorno Generalizado del Desarrollo (T.G.D.) llegan a los tratamientos que necesitan a edades más tempranas, sin embargo, no siempre en este período, tienen acceso a la escuela más adecuada a sus posibilidades y necesidades.

La detección precoz, la intervención profesional y la orientación escolar adecuada en una edad potencialmente rica, como es la primera infancia, son imprescindibles para que el niño pueda echar raíces sólidas, asegurándose un futuro creativo.

Porque la pertenencia al sistema educativo es un derecho que tiene todo niño sean cuales fueran sus características ya que la escuela es el lugar social por excelencia en la infancia.

Porque la inserción en la escuela común de un niño que no puede responder adecuadamente a las demandas sociales y educativas que allí se le plantean, desemboca necesariamente en una marginalidad oculta que lo termina perjudicando. Por el hecho de perder la posibilidad de recibir un trabajo específico acorde a sus necesidades en un momento clave del desarrollo.

Porque la asistencia temprana a una institución escolar especialmente pensada para contribuir al desarrollo de los procesos constitutivos es un complemento fundamental para el trabajo que los niños realicen en sus tratamientos individuales fuera de la institución.

Porque creemos profundamente en las posibilidades que tiene un niño al crecer junto a su familia y un equipo de profesionales capacitados en un ambiente físico especialmente diseñado y equipado.

ZOE es una Escuela Terapéutica para niños que presentan Trastorno Generalizado del Desarrollo (T.G.D.), o sea niños que no han realizado ciertos procesos de estructuración subjetiva acordes a su edad cronológica.

Es una Escuela porque es una institución escolar que cumple con los objetivos pedagógicos trazados para cualquier escuela formal, como con su función socializadora y normativa. Se encuentra incorporada a la ENSEÑANZA OFICIAL (A-1088).

Es Terapéutica porque, para garantizar la construcción de auténticos aprendizajes, partimos de las características individuales de cada niño e intervenimos teniendo en cuenta simultáneamente objetivos pedagógicos y terapéuticos.

Al trabajar en esta dirección no solo se produce un avance en el terreno escolar sino que se lo trasciende hacia una mejor calidad de vida del niño y su familia.